¿Nuevo nacimiento antes de creer en Cristo?

Feb 22 / Roberto Lozano
Dentro del cristianismo, existe un debate sobre el orden en que ocurre la salvación, ¿necesita una persona haber creído en Cristo para nacer de nuevo, o debe haber nacido de nuevo primero para poder tener fe y creer en Cristo? En otras palabras, ¿qué sucede primero en la persona al momento de la salvación, la fe o la regeneración? Esta pregunta no es meramente teórica, sino que tiene profundas implicaciones sobre cómo entendemos el Evangelio y la manera en que Dios obra en la vida del creyente.

El calvinismo clásico sostiene que la regeneración precede a la fe, bajo la premisa de que el ser humano está muerto en sus delitos y pecados, tal como se lee en Efesios 2:1 y, por lo tanto, es incapaz de responder al llamado del Evangelio hasta que Dios primero lo vivifique. Sin embargo, esta enseñanza introduce una distorsión en el orden bíblico de la salvación, convirtiendo la regeneración en un evento separado de la conversión y despojando de sentido al llamado universal al arrepentimiento.

En este artículo, exploraremos qué dice la Biblia sobre la regeneración, la fe y la salvación, y analizaremos el problema teológico que surge cuando se coloca la regeneración antes de la fe.

¿Qué es la regeneración según la Biblia?

El término "regeneración" significa literalmente "nuevo nacimiento" o "renovación de vida." Bíblicamente, la regeneración es el acto de Dios mediante el cual una persona pasa de la muerte espiritual a la vida en Cristo, recibiendo una naturaleza transformada. Algunos versículos clave sobre la regeneración incluyen,

"Nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo."
Tito 3:5

"Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios."

Juan 3:3

"De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas."

2 Corintios 5:17

Estos pasajes muestran que la regeneración es parte del proceso de salvación y ocurre cuando la persona está en Cristo. Pero aquí surge la pregunta clave, ¿cuándo ocurre esta transformación? ¿Antes o después de la fe?

El error del monergismo en el calvinismo

El calvinismo enseña el monergismo, la idea de que la salvación es completamente obra de Dios sin ninguna respuesta activa del ser humano. Según esta doctrina, debido a que el hombre está espiritualmente muerto, Dios primero lo regenera, le da vida espiritual, y solo entonces la persona puede creer en Cristo. Los calvinistas justifican esta enseñanza con pasajes como,

"Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados."
Efesios 2:1

"Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero."
Juan 6:44

"Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios."
Efesios 2:8

Basándose en estos textos, los calvinistas argumentan lo siguiente,

1. El hombre está muerto en pecado y no puede responder a Dios.
2. Dios lo regenera primero, dándole vida espiritual.
3. Como ya tiene vida, ahora puede creer en Cristo.
4. Una vez que cree, es salvo.

Pero este razonamiento no es bíblicamente correcto, porque introduce una idea que la Biblia nunca enseña, y es que una persona puede ser regenerada antes de estar en Cristo.

¿Qué significa estar muerto en pecados?

Uno de los errores comunes del calvinismo es interpretar la muerte espiritual como una incapacidad absoluta de responder a Dios, pero, ¿qué significa estar muerto en pecados según la Biblia? Cuando la Escritura habla de muerte espiritual, no se refiere a una inexistencia o a la incapacidad total de responder, sino a la separación de Dios. 

Un ejemplo claro lo encontramos en Apocalipsis 21:8 cuando se habla de la muerte segunda, dando a entender que la muerte no se refiere a dejar de existir, pues si fuese así, con una primera muerte bastaría, y no habría una segunda muerte. 

"Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda."
Apocalipsis 21:8

Otro ejemplo lo encontramos en la parábola del hijo pródigo. Cuando el hijo regresa a su padre, este dice,

"Porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse."
Lucas 15:24

El hijo pródigo no estaba físicamente muerto ni era incapaz de reaccionar. Estaba separado de su padre, pero cuando decidió volver, fue restaurado. Por lo tanto, si la muerte espiritual significara incapacidad total, entonces el llamado de Dios al arrepentimiento no tendría sentido. Pero la Biblia está llena de llamados a que los pecadores se vuelvan a Dios:

"Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar."
Isaías 55:7

Esto demuestra que los pecadores pueden y deben responder al Evangelio.

¿Cuándo ocurre la regeneración?

La Biblia es clara en que la fe es el medio por el cual una persona recibe la vida en Cristo. Nadie es regenerado antes de creer, sino que es hecho una nueva criatura cuando deposita su fe en Jesús. La fe es el medio por el cual una persona es salva.

"Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios."
Efesios 2:8

La gracia de Dios es el fundamento de la salvación, pero esta salvación se recibe a través de la fe. El versículo no dice "sois regenerados para luego creer", sino que la fe es el medio por el cual una persona es salva. La regeneración ocurre cuando alguien está en Cristo, y estamos en Cristo por la fe.

"De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas."
2 Corintios 5:17

La regeneración significa convertirse en una nueva criatura en Cristo, pero, ¿cuándo ocurre esto? Cuando la persona está en Cristo. Y según la Biblia, uno está en Cristo cuando cree en Él.

"En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa."
Efesios 1:13

Este versículo nos da el orden correcto de la salvación:

1. Primero, la persona oye el Evangelio.
2. Luego, cree en Cristo.
3. Finalmente, es sellada con el Espíritu Santo.

Si la regeneración precediera a la fe, entonces este pasaje debería decir que una persona es sellada con el Espíritu antes de creer. Pero la Escritura es clara, el Espíritu Santo es dado después de la fe, no antes. Jesús enseñó que la vida eterna es recibida por la fe, no antes de ella.

"De cierto, de cierto os digo: El que cree en mí, tiene vida eterna." 
Juan 6:47

Jesús no dijo, "El que ha sido regenerado, luego creerá y tendrá vida eterna." Al contrario, la vida es recibida cuando la persona cree en Él. La regeneración está vinculada con el nuevo nacimiento, y este ocurre al recibir a Cristo.

"Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios."
Juan 1:12

Aquí vemos nuevamente el mismo orden en la salvación,

1. Primero, la persona cree en Jesús y lo recibe.
2. Luego, Dios le da la potestad de ser hecha hija de Dios, es decir, le concede el nuevo nacimiento.

Si la regeneración ocurriera antes de la fe, este versículo debería decir: "A todos los que fueron regenerados, se les dio la capacidad de creer". Pero no dice eso, sino que la fe es el requisito para recibir la vida de Dios.

El peligro de la falsa seguridad calvinista

El problema del calvinismo al creer que la regeneración precede la fe no es simplemente un error teológico, sino el impacto que esta doctrina puede tener en la manera en que una persona entiende su salvación. Si alguien cree que la regeneración ocurre antes de la fe, puede llegar a pensar que su salvación es un hecho consumado antes de haber creído en Cristo, simplemente porque Dios lo ha elegido. En consecuencia esto conllevaría a un cristianismo sin conversión real, donde la persona confía que ha sido regenerada no porque ha recibido a Cristo, sino porque ha sido elegida de manera irrevocable por Dios para serlo.

En este esquema, confesar a Cristo por fe deja de ser el punto central de la salvación de la persona para convertirse en un paso más dentro del sistema soteriológico de Dios, siendo en cambio, la gracia el elemento central, ya que la persona habría sido regenerada por la gracia de Dios, y no por el Dios de la gracia al momento de recibir a Cristo como salvador. Asimismo, en este esquema, ya no sería la sangre de Cristo la que ha limpiado al pecador de su pecado, pues Cristo ya recibiría a una persona limpia debido a la regeneración por gracia irresistible recibida previamente.

El peligro de esta mentalidad es que puede llevar a alguien a poner su confianza en la doctrina de la elección y la gracia irresistible, en lugar de en Cristo mismo como Salvador. En otras palabras, una persona podría llegar a confiar más en la gracia irresistible que en el Autor de la gracia. Pero la Biblia es clara,

"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna." 
Juan 3:16

Jesús no dijo "para que todo aquel que es regenerado antes de creer tenga vida eterna". La fe es necesaria para recibir la vida de Dios, la fe es previa a la regeneración.

La fe precede a la regeneración

En conclusión, la Biblia presenta un orden claro en la salvación, la fe en Cristo es el medio por el cual una persona recibe la nueva vida. Sin embargo, el calvinismo invierte este orden, enseñando que la regeneración ocurre antes de la fe. Esto no solo carece de fundamento bíblico, sino que también distorsiona el llamado de Dios al arrepentimiento. La Escritura es clara sobre este tema. 

1. La regeneración es parte de la salvación, y la salvación ocurre cuando una persona cree en Cristo.
2. La muerte espiritual es separación de Dios, no incapacidad absoluta de responder.
3. Dios llama a todos los pecadores al arrepentimiento, lo que implica que pueden responder.
4. No hay ningún pasaje que afirme que el nuevo nacimiento ocurre antes de la fe.

El error del calvinismo es poner la regeneración antes de la fe, alterando el orden bíblico de la salvación, generando confusión sobre el papel del arrepentimiento y la fe, y consecuentemente, promoviendo una salvación teológica, no genuina, un cristianismo sin conversión, un cristianismo sin Cristo. Por lo tanto, si quieres ser salvo, cree en Jesucristo y recibe la vida nueva que Él da. No creas las doctrinas calvinistas, no esperes un nuevo nacimiento previo a la fe en Cristo, porque Jesús dijo, "El que cree en mí, tiene vida eterna." 
Juan 6:47